La Momia Azteca contra el Robot Humano es una película mexicana estrenada en 1958, dirigida por Rafael Portillo y protagonizada por Ramón Gay y Rosa Arenas. Puede clasificarse en los géneros de terror, ciencia ficción y aventura.
Primitivo acercamiento al Cyborg en México
Durante la primera mitad del siglo XX, el mundo en general estaba preocupado por los alcances y peligros que las nuevas tecnologías presentaban a la humanidad. El comunismo y un conflicto nuclear global parecían peligros inminentes, todos estos temores influenciaron profundamente a la cultura y al cine de la época. La era atómica llenaba las pantallas con monstruos, ciencia ficción, alienígenas y por supuesto robots: seres mecánicos de exterior frío, calculadores, lógicos e implacables.
En nuestro país los temas de ciencia ficción podían encontrarse en las tramas de las películas de luchadores. Cintas en donde el Santo y otros súper atletas le hacían frente a vampiros, momias, zombies y otros populares monstruos de la literatura. En este contexto, en el año de 1958 se estrenaría una curiosa película que si bien no se alejaba demasiado de las historias de los ídolos del ring si proponía conceptos interesantes y novedosos para
la época: La Momia Azteca contra El Robot Humano. Casi treinta años antes de RoboCop y Terminator, “a Momia Azteca contra El Robot Humano ya nos introducía a la idea del cyborg, un hombre fusionado o más bien atrapado dentro de una máquina. El guión toma como guía y referencia la historia clásica del monstruo de Frankenstein, de ahí que un científico loco roba cadáveres para crear una monstruosidad. Sin embargo a diferencia del moderno prometeo la criatura resultante no está hecha con las partes de los muertos sino que el material orgánico se amalgama con una muy pintoresca y un tanto acartonada armadura metálica para crear así al robot humano.
Si bien los efectos especiales hoy en día lucen muy pobres y el robot es básicamente un traje de latón con foquitos de colores del que se asoma una cabeza humana, es muy interesante ver esta muy primitiva e ingenua concepción de lo que era un cyborg. Sin las implicaciones filosóficas de Inteligencia Artificial o Blade Runner, los cineastas mexicanos nos presentan la idea literal del cuerpo humano reemplazado y mejorado con partes cibernéticas.
La película toma prestados bastantes elementos de otras cintas norteamericanas de ciencia
ficción y terror como Robot Monster y La Momia de Boris Karloff, además de que se tropicaliza la idea de la maldición de la momia egipcia y se trae a México combinándola de paso con elementos de la mitología prehispánica. Toda esta mezcolanza narrativa tiene como resultado una curiosa batalla entre la superstición folklórica tradicional (representada por la momia) y los crecientes temores tecnológicos (en este caso el robot humano) La Momia Azteca contra El Robot Humano es una obra de culto del cine nacional que nos
ofrece una visión inocente sobre las aplicaciones de la tecnología y plantea conceptos que más adelante se convertirían en temas recurrentes de la ciencia ficción. Vale la pena darle una oportunidad.
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